¡Hola a todos! Muchos seguidores de redes sociales me preguntáis a menudo en que consiste tener un caballo a fruto o cedido. Pues bien, en este post os explico cómo funciona más o menos y cómo esta siendo mi experiencia con Parce.

Se conoce como «pupilaje», «cesión» o «régimen de fruto por alimento» al proceso de alquiler de un caballo. Es decir, el dueño del animal nos lo deja, como si fuera «nuestro», a cambio de asumir su manutención.

El tener un caballo pupilado me parece un buen paso intermedio para saber si realmente podemos hacernos cargo de un caballo si tenemos la idea de comprar uno en un futuro, ya que tenemos las responsabilidades de un propietario sin estar atados a vender en el caso de que por cualquier motivo no nos podamos seguir haciendo cargo de él.  En el mundo de la competición se da mucho este regimen de cesión, propietarios ceden sus caballos a jinetes profesionales para que los pongan y los corran en distintos concursos, desde nacionales hasta internacionales.

Después de esta pequeña introducción, os explico que ventajas y que desventajas más obvias que veo a la cesión de un caballo:

Ventajas:

1. Es un paso intermedio a la compra de un caballo sin tener que hacer el desembolso inicial que supone adquirir un animal, sea cual sea el precio .
2. El caballo es como si fuera tuyo, lo visitas, mantienes, cuidas y trabajas de manera más independiente y disfrutarlo más.
3. Te suelen dar un periodo de prueba y luego ya decides si quieres o no comenzar el regimen de fruto por alimento.
4. En algunas ocasiones, te permite llegar más lejos y aprender más en una disciplina por las cualidades del caballo.
5. No existe ese problema de tener que «compartir» el caballo con otros compañeros de la escuela de equitación.
6. En el caso de que no podamos hacernos cargo de él, si avisamos con tiempo, se puede cerrar el acuerdo y el caballo pasa a ser en su totalidad del propietario.

Desventajas:

1. Aunque sea más «barato» a corto plazo por la cuestión de no desembolsar dinero en una compra, a la larga es una manutención de un caballo que supone dinero mes a mes.
2. No siempre puedes hacer lo que quieres con el caballo, en el sentido de que si te lo quieres llevar a otra cuadra o a un concurso. Se debe consultar previamente con el propietario por si nos da el aprobado. Por supuesto, esto depende del acuerdo al que se llegue con el dueño.

En el caso de que finalmente nos decidamos por coger un caballo a fruto, es conveniente firmar un acuerdo por escrito con el propietario del caballo, ¿por qué? En el contrato, se puede especificar la durabilidad de la cesión, quien paga que, que podemos o no podemos hacer con el caballo… Además del precio inicial del caballo antes del comienzo del acuerdo para que, si en el futuro nos decidimos por comprarlo y después de meses o años trabajando con él sube su valor, se tenga en cuenta nuestro esfuerzo, tiempo y dinero invertido y no traten de cobrarnos de más después de haber puesto al caballo.

También existe la posibilidad de coger un caballo a medio fruto o compartir la cesión, es decir, no pagas la totalidad del caballo pero lo compartes con una o más personas en el caso de que el pupilaje se nos vaya de precio.

Mi experiencia con Parce

Allá por el mes de marzo decidí dar el paso y le comenté a Manuel, mi profesor, que quería buscar un caballo para pupilar. Después de mes y medio, compró a Parce (quien realmente se llama Cantaor, jajaja) y lo trajo a Hípica El Potril para venderlo pero, él y mi amiga Sara, pensaron que podría ser un caballo interesante para mí, lo probé durante un mes, ¡y en mayo decidí dar el paso y pupilarlo!

El mayor cambio ha sido, sin duda, el desembolso económico, ya que antes no pagaba el pupilaje de un caballo y eso se nota bastante, además de la responsabilidad de ir a visitarlo, montarlo y trabajarlo a menudo. Pero ese gasto se compensa en experiencia, ha sido una auténtica maravilla ver el cambio que ha pegado el caballo desde que llegó a la cuadra a hoy es increíble y poder formar parte de eso ha sido toda una aventura.

¿Conocíais este regimen? ¿Habéis pupilado algún caballo o, si eres propietario, has cedido algún caballo? Contadmelo en los comentarios, estoy deseando saber vuestras opiniones.

¡Un abrazo!

Silvia

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